El síndrome de la fragilidad se define como un estado de vulnerabilidad
que conlleva un incremento en el riesgo de eventos adversos y
discapacidad en los ancianos. Es una condición cuyas causas y
fisiopatología resulta compleja. Con el envejecimiento , la potencia
muscular se deteriora de forma más precoz que la fuerza muscular y en
poblaciones frágiles la potencia se asocia de forma más significativa con la
capacidad funcional que fuerza muscular. En la actualidad , incluso en los
más ancianos , los programas de entrena-miento multicomponente
constituyen las intervenciones más relevantes para enlentecer la
discapacidad y otros eventos adversos , especialmente aquellos donde los
ejercicios de fuerza se acompãnan de otros ejercicios a altas velocidades
dirigidos a mejorar la potencia muscular. Además , estos programas
resultan intervenciones eficaces en otros dominios de la fragilidad como
el deterioro cognitivo y las caídas. En el anciano frágil , el ejercicio físico
debería prescribirse de forma progresiva , con un plan individualizado y
con la misma exactitud que otros tratamientos médicos.