Los altos niveles de fatiga acumulados durante un partido de fútbol o entrenamientos de
alta intensidad pueden llevar al jugador a estados de cansancio más o menos prolongados,
de forma que vea disminuido su rendimiento e incrementada la posibilidad de aparición de
lesiones. Por ello las estrategias de recuperación cobran vital importancia para asegurar que
los jugadores puedan afrontar los esfuerzos siguientes con el mejor estado físico posible.
Una óptima recuperación posibilitará realizar esfuerzos de mayor calidad y con un menor
riesgo de lesiones.
En la presente tesis se llevaron a cabo dos intervenciones con el objetivo de (1) comparar
estrategias de recuperación combinadas y simples en jugadores de fútbol profesionales, (2)
evaluar la eficacia de estrategias de recuperación combinadas en jugadores de fútbol semiprofesionales
y (3) comparar la eficacia de dos estrategias de recuperación combinadas
entre jugadores de fútbol de profesionales y semi-profesionales.
Dichas intervenciones se llevaron a cabo mediante dos fases experimentales en periodo
competitivo. La primera fue realizada durante cuatro semanas en la temporada 2010-2011
con un equipo profesional, mientras que la segunda se realizó en las tres primeras semanas
de la temporada 2011-2012 con un equipo semi-profesional. En ambas se utilizó un diseño
cruzado y aleatorizado para comparar los efectos de tres y cuatro estrategias de
recuperación post-entrenamiento, respectivamente. Cada equipo se dividió de forma
aleatoria en subgrupos y un día por semana los jugadores fueron evaluados antes del
entrenamiento, inmediatamente después del mismo, tras la recuperación y tras 24 horas. Se
midieron parámetros fisiológicos (temperatura timpánica y hormonas), subjetivos (escalas
de esfuerzo percibido, dolor muscular y percepción de la recuperación) y condicionales
(flexibilidad).
Los resultados muestran que no existieron diferencias a la hora de aplicar las estrategias
combinadas o simples en jugadores de fútbol profesionales. En el grupo semi-profesional la
estrategia que incluía inmersión en agua fría mostró mejores valores en las escalas
subjetivas inmediatamente tras la recuperación, pero no se hallaron diferencias entre
estrategias pasadas 24 horas. En la comparación de grupos de nivel, profesional y semi.
profesional, los resultados no mostraron diferencias a la hora de aplicar dos estrategias
combinadas.
Tras los resultados obtenidos se concluye que la aplicación de estrategias de recuperación
combinadas no muestra ser más eficaz en comparación con una estrategia de recuperación
simple en un equipo de fútbol profesional. Por otro lado, cuando una estrategia de
recuperación incluye inmersión en agua fría la recuperación muestra mayor eficacia en
valores subjetivos, pero solo de forma inmediata tras la recuperación. Finalmente, el nivel
de los jugadores no parece influir en la recuperación tras la aplicación de dos estrategias
combinadas.