La gestión de la comunicación externa en los museos andaluces

Abstract

En los últimos años, Andalucía ha incrementado notablemente su oferta turística y cultural, en la que los museos juegan un papel primordial. Con 182 museos censados, de los que 36 son de tipología artística (Arte Contemporáneo, Bellas Artes y Artes Decorativas), se ha convertido, según el Anuario de Estadísticas Culturales 2015 elaborado por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, en una de las comunidades con mayor densidad museística. A pesar de contribuir al gran desarrollo del ámbito cultural andaluz, los museos han ido admitiendo con más lentitud que otras instituciones la necesidad de adoptar una conducta comunicativa que fuera más allá de la única tarea de proporcionar información. Poco a poco, comenzaron a contar con departamentos de comunicación y profesionales que no solo estaban destinados a las relaciones con los medios, sino también a las relaciones externas e internas y a las relaciones públicas. Sin embargo, el desempeño de este tipo de acciones se ha ido viendo cada vez más relacionado con el empleo de nuevas tecnologías que tratarían de fomentar el contacto entre centro museístico y sus diferentes públicos. En concreto, con sus visitantes. Ahora, estas instituciones culturales se encuentran sumidas en un dilema: ¿las estrategias de comunicación interactivas facilitan su labor o se configuran como un mero obstáculo que se interpone entre el artista, la obra y su público? En la presente tesis doctoral, se presentan los resultados de una amplia investigación sobre la gestión de la comunicación externa que se lleva a cabo en los museos y centros de arte andaluces con los visitantes, centrándonos en el empleo de nuevas tecnologías y experiencias interactivas. Para ello, un total de 40 museos andaluces han formado parte de la muestra objeto de estudio. La metodología empleada se basa en la observación directa no participante, la encuesta, el análisis de contenido y el método Delphi. En primer lugar, se realizaron visitas a los diferentes centros participantes donde el investigador era un usuario más del museo para comprobar el nivel de interactividad física. Información que fue complementada con encuestas a los profesionales que gestionan la comunicación actualmente en cada museo de la muestra y el análisis de páginas web y redes sociales, con el objetivo de estudiar cómo se estaba llevando a cabo la comunicación online. Por último, se realizó el método Delphi, en el que expertos del ámbito de la Comunicación y los museos nos aportaron una visión general sobre las diferentes tendencias que tomará la gestión de la comunicación museística del futuro próximo. A modo de conclusión global, podemos afirmar que la Comunicación ya está presente en los museos artísticos andaluces, pues estos son conscientes de su necesidad a la hora de difundir su contenido y conectar con el público. Sin embargo, a pesar de ello, existen ciertas carencias en la gestión que están retrasando su correcta implantación y efectividad, como la ausencia de profesional especializado en esta materia que aporte una visión estratégica y la falta de adaptación selectiva y adecuada de las herramientas que proporcionan las nuevas tecnologías para lograr el engagement.