La
conferencia
trata
de
explicitar
la
necesidad
de
atender
a
la
diversidad
del
alumnado
mediante
estrategias
que
permitan
adaptar
los
objetivos
educativos
a
sus
diferencias
individuales
y
concretamente
a
los
distintos
estilos
de
aprendizaje.
Para
ello,
la
autora
considera
de
relevante
importancia
cómo
el
aprendizaje
se
produce
en
cada
persona
de
forma
singular,
en
función
de
las
interacciones
particulares
que
se
establecen
con
el
entorno,
los
adultos
y
los
iguales.
Todo
esto
lo
lleva
al
ámbito
universitario
acentuando
la
importancia
de
la
formación
de
todos,
sin
excluir
a
nadie,
de
las
competencias
profesionales
que
cada
alumno
ha
de
adquirir
según
el
nuevo
Espacio
Europeo
de
Educación
Superior.
Por
ello,
pone
el
énfasis
en
la
manera
y
forma
en
la
que
aprenden
los
alumnos
para
que
logren
tener
éxito
en
la
academia
individualizando
la
enseñanza,
con
el
firme
propósito
de
indagar
en
aquellos
métodos
que
hagan
que
cualquier
alumno
consiga
una
enseñanza
de
calidad.
La
heterogeneidad
de
los
servicios
empleados,
como
el
papel
que
juega
la
orientación
educativa
y
el
asesoramiento
se
tornan
en
ejes
principales
e
indicadores
de
calidad,
que
a
través
del
conocimiento
de
los
estilos
de
aprendizaje
desarrollan
instrumentos
eficaces
de
inclusión
dentro
de
los
espacios
educativos,
y
generan
estilos
de
enseñanza
adecuados
a
las
dimensiones
y
al
conocimiento
particular
de
cada
individuo.
La
finalidad
última
de
esta
conferencia
se
sitúa
en
destacar
las
capacidades,
estilos
y
tareas
para
potenciar
las
preferencias
dominantes
y
paliar
los
puntos
débiles.