Es frecuente que en la docencia en microprocesadores, lo que menos hay es electrónica digital. En muchos casos se utiliza un dispositivo comercial cuya descripción se basa en bloques funcionales sin los esquemas de los circuitos que los implementan. Una vez hecha esta descripción se pasa a su utilización (programación del dispositivo). Esta forma de actuar es informática pero no electrónica. La justificación de ello está en la complejidad de los circuitos que se utilizan en los microprocesadores. Sin embargo esto se supera fácilmente analizando cada elemento necesario para construir un microprocesador y desarrollando los esquemas utilizando dispositivos comerciales disponibles. Esta forma de bricolaje aplicado a la electrónica digital da muy buenos resultados en cuanto a la comprensión del funcionamiento por parte de los estudiantes. Con esta técnica, los estudiantes “ven” como funciona cada una de las partes ya que disponen de los catálogos de los fabricantes y conocen su funcionamiento porque son elementos básicos de electrónica digital, como puertas, biestables, circuitos combinacionales y secuenciales. Además pueden experimentarlos ya sea haciendo el montaje o por simulación.