La omnipresencia de las redes sociales y su influencia en el día a día está fuera de toda
duda, por lo que resulta imprescindible entrar a analizar tanto su potencial educativo como
las consecuencias pedagógicas, sociales y políticas de su uso, tanto positivos como
negativos, para así poder establecer criterios sobre cómo se está configurando el estatus
de ciudadanía a raíz de la influencia de las redes sociales en un mundo 'virtual' donde
conceptos como experiencia o intimidad se están transformando. Todo esto supone
grandes desafíos desde el ámbito educativo a lo que resulta imprescindible ir dando
respuestas y argumentos para un debate cívico y ético necesario.