Torremolinos constituye un caso destacable que resalta la estrecha vinculación que existe entre el tipo de desarrollo turístico y los patrones de localización de la industria hotelera. Este estudio muestra la evolución de un destino maduro de sol y playa, que ha creado una notable oferta hotelera a lo largo del tiempo. Para comprender la distribución temporal y espacial de la oferta
hotelera, se propone un modelo de localización de la actividad hotelera. Las herramientas de análisis utilizadas han sido la recopilación de la información documental y estadística relativa a los hoteles, las ortofotografías aéreas para el estudio de los cambios de usos del suelo, el análisis estadístico para conocer el comportamiento espacial y el trabajo de campo para localizar los establecimientos hoteleros. La investigación comprueba la existencia de clusters espaciales como estrategia de implantación del sector hotelero de Torremolinos.