Esta investigación muestra el uso de la figura de Pelayo en tres momentos históricos precisos: la Edad Media, en la que se escribe el martirio del santo; el siglo XVI, en el que se crean las imágenes del retablo de San Pelayo de Becerril de Campos, coincidiendo con la proclamación de la Pragmática contra la sodomía por parte de los Reyes Católicos; y la Guerra Civil española y el primer franquismo, cuando el retablo llega a la ciudad de Málaga, y la figura de Pelayo cobra nuevos significados. Metodológicamente, esta investigación propone lecturas queer de la figura de Pelayo, enlazando con la tradición anglosajona de Queer Iberia, una tradición que, partiendo de Américo Castro, revisa la literatura producida en la Edad Media ibérica desde una perspectiva queer.