La crisis ha supuesto una democracia en crisis en este escenario postcrisis que vivimos de imprevisibles consecuencias y de una gravedad desconocida. La Ciencia Política identifica, eso sí, algunos rasgos que hacen patente la gravedad de esta crisis de la democracia: democracias más inestables y con una gobernabilidad más difícil; ciudadanos con menor confianza en la clase política y en las instituciones democráticas y, finalmente, líderes y partidos populistas. Es obvio, que los conceptos –desde posdemocracia a democracia iliberales- designan también democracias peores. El objeto de esta ponencia trataría dos aspectos: Por un lado, sobre la debilidad del vínculo entre el Estado y la ciudadanía en las democracias actuales y, por otro, la política de los populismos.