El proyecto pictórico, Interludio, parte de mi interés por cuestionar el cuadro como artefacto de representación, mediante la exploración y relectura de recursos de la pintura barroca, sobre todo española y holandesa, junto con ciertas estrategias figurales y de des-reconocimiento de la pintura contemporánea.
A partir de tradiciones pictóricas de género como el bodegón o el interior, subrayo su carácter de “puesta en escena” y, a través de la igualación de los elementos figurativos y figurales, produzco idas y venidas entre diferentes grados de representación, incidiendo e investigando en toda una dialéctica del ver.