Esta aportación trata de exponer el breve recorrido de un proyecto de innovación educativa que ha arrancado con el presente curso académico 2019-2020, en 6 universidades de España y Ecuador, de la mano de 24 profesores y profesoras, que imparten docencia en más de una docena de grados y dos posgrados. Busca introducir la red social Instagram como un complemento a las herramientas con que la universidad ha dotado al proceso educativo en el nuevo marco digital y frente a los retos del Espacio Europeo. Instagram, además de permitirnos configurar un espacio híbrido de interacción con los discentes (cuarto lugar), por yuxtaposición de la acción material en el aula y la virtual en la cuenta de la red social, aúna interesantes características proclives a su adaptación a la docencia. Primero por su incesante incremento de usuarios en los últimos años, frente al resto de redes, especialmente entre los internautas de 16 a 23 años, rango de edad de nuestros alumnos, lo que facilita la labor de su presentación, al ser de uso cotidiano para ellos. También nos ofrece su versatilidad para soportar material visual, fundamental en las materias del proyecto y, en general, como soporte comunicativo en la actual sociedad.