El objetivo fundamental de esta comunicación estriba en explorar, a través de un análisis de contenido, los rasgos de los bulos difundidos en España referidos al ámbito de la política registrados en las plataformas de verificación Maldita.es, Newtral, EFE Verifica y Verificat —únicas entidades españolas pertenecientes a la International Fact-Checking Network (IFCN)— entre el 1 de enero y el 28 de febrero de 2022 (n=47). También se puso el foco sobre las rutinas profesionales de los fact-checkers, examinando las fuentes consultadas para la verificación de los mensajes. Todas las unidades de registro fueron sometidas a una ficha de análisis dividida en tres dimensiones: datos de registro, análisis formal y análisis del mensaje.
Los resultados muestran que estos bulos se difunden preponderantemente a través de Twitter (83%), Facebook (59%) y WhatsApp (40,4%). Asimismo, para su construcción se aprecia una notable importancia de los elementos visuales, siendo el texto simple junto a fotografía (25,3%) y el texto incrustado en imagen —los denominados pantallazos— (38,4%) los formatos más recurrentes; este último empleado frecuentemente para falsificar, mediante montajes, noticias publicadas por medios de comunicación —El País, La Vanguardia, Heraldo de Aragón o 20 Minutos son algunos de los rotativos que se ven involucrados en estas cadenas desinformativas—. En cuanto al alcance, la mayoría de las fake news abordan cuestiones de la vida política nacional (63,8%), frente a la discreta proporción de piezas relativas al ámbito autonómico (23,4%) o local (8,5%). Por su parte, se detecta una finalidad eminentemente política/ideológica (78,7%) en el proceso de difusión, si bien también se contabilizan diversos bulos con un fin satírico o humorístico (10,6%).