Los movimientos por la justicia medioambiental se han convertido en actores relevantes en los procesos de decisión política. Esto se debe a su capacidad, según sus defensores, de interlocución entre la sociedad civil y las instituciones de gobierno en sus múltiples niveles, hasta el punto de ejercer una labor cognitiva de vanguardia en la deliberación pública. Desde la eclosión del cambio climático como problema socioambiental protagonista, estos actores han devenido movimientos por la justicia climática, planteando nuevos desafíos a distintas formas de gobernanza doméstica e internacional. En esta ponencia se problematizan las aportaciones cognitivas de ambas oleadas en dos ámbitos: sostenibilidad medioambiental y justicia global. Para ello, se emplea el marco epistemológico aportado por el Antropoceno. La conclusión es que, si bien estos movimientos han registrado avances en este terreno, sus aportaciones aún distan de satisfacer las expectativas de sus defensores teóricos.