La investigación toma como objeto de estudio los conjuntos de vivienda pública construidos ante las urgentes necesidades cuantitativas de viviendas existentes en Europa al finalizar las guerras de mitad de siglo como respuesta al trasvase de población campo-ciudad. Estos crecimientos comparten muchas de las características morfológicas y tipológicas con sus homónimas europeas. Sin embargo, las políticas en materia de vivienda que se desarrollan en España tras la Guerra Civil –dentro de un contexto socio-político marcado por un fuerte control del Estado– hacen que las ciudades españolas presenten ciertas peculiaridades en su desarrollo. En concreto, la investigación persigue analizar el contexto –social, económico y político– que condicionó la construcción de vivienda de forma masiva en España en la segunda mitad del siglo XX a través del análisis de la legislación urbanística y en materia de vivienda aprobada y la identificación de los organismos responsables de la construcción de vivienda pública en estos años. El trabajo detecta que a lo largo del marco temporal analizado se aprueba una amplia casuística de legislación específica en materia de vivienda, pero con un mismo objetivo: responder al problema persistente de la vivienda, primero desde la necesaria reconstrucción de un país y posteriormente como respuesta al hacinamiento que acuciaba a los núcleos urbanos. Del análisis de los sucesivos planes de vivienda, y de los tipos de vivienda de protección estatal creados para su desarrollo se extrae que, a pesar del reiterado esfuerzo realizado desde el Estado por paliar el enorme déficit de viviendas, no es hasta el Plan Nacional de la Vivienda de 1961 cuando se consiguen alcanzar unos datos de construcción de vivienda acorde con las necesidades estimadas. De este análisis también se extraen consideraciones sobre el cambio que se produce en los ámbitos preferentes para la construcción de vivienda social a lo largo del marco de esta investigación.