En Corea se estudia el teatro occidental en la universidad, pero en los estudios universitarios de arte dramático en España, se obvian por completo las artes escénicas de Oriente. Esta tesis investiga los orígenes del teatro coreano y su evolución hacia formas más contemporáneas de dramaturgia. Se ha investigado pormenorizadamente la historia del teatro coreano, las transformaciones que ha ido sufriendo a lo largo de los siglos, privilegiando el periodo comprendido entre el siglo XVIII y el XXI, y también se ha realizado una comparativa entre diversas compañías de teatro extranjeras en Corea y otras tantas compañías coreanas en occidente. En el siglo XIX surgieron compañías profesionales que viajaban a través de la península de Corea y representaban espectáculos que combinaban elementos circenses, malabares y acrobacias. Estas compañías representaban sus obras en el teatro en los mercadillos itinerantes o en determinadas fiestas tradicionales del pueblo. Esto tenía que ver también con el aumento de los centros urbanos en la época. En 1900 comenzó a penetrar la influencia cultural de occidente y la sociedad coreana, en su conjunto, sufrió una transformación general. La caída de la dinastía Joseon implicó un abandono de las formas tradicionales de relacionarse a todos los niveles (económico, urbano, cultural, etc) y un cambio de paradigma en las rígidas jerarquías sociales que habían imperado hasta ese momento que afectaron al teatro. Pero, con la introducción del teatro occidental en Corea, el público no comprendía lo que ocurría en la escena por la distancia de los contextos históricos coreano y europeo, y por las grandes diferencias en los elementos de la propia representación, incluida la vestimenta occidental. La influencia de Occidente en las artes escénicas occidentales implicó una reformulación de conceptos, formas, técnicas y expresiones en lo que respecta a las formas teatrales producidas en el país.