El objetivo del trabajo es analizar los posibles efectos que el COVID19 haya podido tener sobre la salud de los andaluces y sus factores determinantes.
La fuente de información elegida es la “Encuesta Sanitaria y Social de Andalucía”, concebida como un panel a partir de la Encuesta Social 2020 de Hábitos y Condiciones de Vida de la población andaluza durante el estado de alarma. Esta proporciona información sobre salud general, mental y bienestar emocional, hábitos y estilos de vida, condicionantes socioeconómicos, características de las familias y sus viviendas y uso del tiempo.
Mediante modelos de regresión logit ordenados con efectos aleatorios se analiza el efecto de estos condicionantes sobre la salud general y mental de la población y el cambio experimentado en la misma respecto al año anterior a las entrevistas.
Los resultados de la primera oleada muestran que la probabilidad de haber empeorado la salud mental aumenta en mayor medida para los que están deprimidos, duermen peor que antes del confinamiento, y éste les resultó difícil de sobrellevar, en cambio, se reduce para los mayores de 65 años y la educación no es relevante. Respecto a la salud general, únicamente haber tenido un confinamiento difícil, problemas de tensión arterial, hacer menos ejercicio o no dormir mejor que antes, aumentan la probabilidad de haber empeorado el estado de salud general respecto al año anterior.