La fibrilación auricular (FA) es actualmente la arritmia cardíaca más prevalente en población general. En ablación de venas pulmonares (VPs), procedimiento percutáneo desarrollado para control de ritmo, no existe un consenso sobre qué técnica elegir ante un primer procedimiento, si radiofrecuencia (RF) o crioablación (CB). Esta decisión es habitualmente dejada en manos del electrofisiólogo/a, la disponibilidad de recursos hospitalarios y las preferencias del paciente. Este trabajo se sustenta sobre la hipótesis de si la CB podría reducir la realización de un segundo procedimiento de ablación (reablación) a largo plazo en pacientes con FA paroxística y persistente, sin aumentar el número de complicaciones asociadas, lo cual tendría un impacto directo en la calidad de vida de los pacientes. Para ello, 1055 pacientes (grupo CB=557 y grupo RF=498), sintomáticos y refractarios a medicación antiarrítmica, sometidos a un primer procedimiento de ablación entre enero de 2009 y marzo de 2019 fueron incluidos y se siguieron exhaustivamente durante 30 meses. Como resultado, se objetivó en múltiples modelos de regresión con sucesivos grados de ajuste por las diferentes covariables clásicamente implicadas en la recurrencia arrítmica tras la ablación, como son: edad, sexo, fumador activo, hipertensión arterial, dislipemia, diabetes mellitus, síndrome de apnea obstructiva del sueño grave, dilatación auricular izquierda, presencia de recurrencia precoz y evidencia de FA persistente; que el uso de CB redujo la reablación en el seguimiento, en el total de pacientes (HR=0.45 IC 95% 0.32-0.61; p<0.001) y en los subgrupos de pacientes con FA paroxística (HR=0.47 IC al 95% 0.31-0.70; p<0.001) y persistente (HR=0.46 IC al 95% 0.27-0.76; p<0.001). La RF, además de la presencia de dilatación auricular izquierda, recurrencia precoz y FA persistente, se encontraron como variables predictoras de reablación.