El consumo moderado de bebidas fermentadas, como el vino tinto, se ha asociado con efectos beneficiosos cardiovasculares y metabólicos. De manera similar, otras bebidas fermentadas, como la cerveza, podrían tener efectos positivos en la salud. En este sentido, aunque los mecanismos a través de los cuales podrían ejercer estos beneficios no son completamente conocidos, los efectos antioxidantes y antiinflamatorios de algunos de sus componentes, como los polifenoles, podrían tener un papel importante.
En los últimos años, la microbiota intestinal se ha postulado como un elemento clave en la salud y en la fisiopatología de las enfermedades metabólicas. Evidencia reciente demuestra que la microbiota intestinal es susceptible de ser modificada a través de distintas estrategias, como las intervenciones dietéticas. Sin embargo, la potencial mediación de los efectos beneficiosos del consumo moderado de cerveza a través de la modulación de la microbiota intestinal, así como la interacción de ésta con los distintos componentes fenólicos de esta bebida es aún poco conocida. De esta forma, el objetivo de este trabajo fue evaluar los cambios en la microbiota intestinal producidos tras el consumo moderado de cerveza, así como analizar las diferencias en resultados en función de la cantidad de polifenoles contenidos en esta bebida.
Para ello, llevamos a cabo un ensayo clínico aleatorizado cruzado incluyendo tanto a voluntarios sanos como a pacientes con síndrome metabólico (10 participantes en cada grupo), en el que estudiamos los efectos del consumo moderado de cerveza con distinto contenido en polifenoles (sin alcohol, bajo contenido en polifenoles; lager, contenido intermedio en polifenoles; negra, alto contenido en polifenoles; 2 semanas de consumo en cada uno de los períodos de intervención) en la microbiota intestinal.