Dado el incremento que se ha producido del ciberacoso en los adolescentes y en el grave impacto negativo sobre la salud de los implicados, la literatura científica ha intentado profundizar en el conocimiento de este fenómeno. Numerosos estudios han analizado posibles factores de riesgo y de protección ante la ciberagresión, siendo de los factores de riesgo el haber sufrido previamente cibervictimización mientras que, entre sus posibles factores de protección, las estrategias de afrontamiento parecen ejercer una gran influencia en las probabilidades de volver a implicarse en situaciones de ciberacoso. Sin embargo, es necesaria mayor investigación para profundizar en la relación cibervictimización-ciberagresión y conocer el rol que las estrategias de afrontamiento pueden ejercer. Dado que la literatura ha mostrado diferencias de sexo en el uso de las estrategias de afrontamiento es importante conocer si pueden influir de manera diferente en la probabilidad de ocurrencia de la ciberagresión en chicos y chicas. Por ello, este estudio examinó el posible papel moderador de las estrategias de afrontamiento en la relación cibervictimización-ciberagresión, y analizó si existían diferencias en dicha relación en función del sexo. Se realizó un estudio transversal con 1564 adolescentes (12-18 años) que cumplimentaron un cuestionario de ciberacoso y otro de estrategias de afrontamiento de regulación cognitivo-emocional. Tras realizar varios análisis de moderación, los resultados indicaron una interacción significativa en la muestra total y en la de chicas, donde tanto las estrategias adaptativas como las desadaptativas ejercían un papel moderador en la relación cibervictimización-ciberagresión. Estos resultados han permitido profundizar sobre posibles factores moderadores que ayuden a comprender por qué quienes sufren cibervictimización pueden acabar ciberagrediendo a otros. Asimismo, muestran los potenciales beneficios de entrenar y desarrollar estrategias de afrontamiento.