El presente artículo analiza el actual duopolio de las empresas que gestionan los rankings de las publicaciones y cómo esta dinámica afecta a la Universidad pública en general y al sistema de acreditación del profesorado investigador en España. La reflexión crítica sobre las causas y consecuencias de este modelo de evaluación no neutral evidencia colisiones entre los imaginarios políticos y académicos que promueven una hegemonía de las ciencias sobre las ciencias sociales, así como lógicas geoestratégicas que hiperrepresentan la literatura científica en lengua inglesa y la propensión hacia aspectos cuantitativistas en la tendencia editorial global.