El proyecto Patrimonio Herido plantea dos objetivos principales: fomentar el interés por la recuperación de bienes culturales en situación de peligro y reivindicar el rol del historiador del arte como profesional esencial en equipos transdisciplinares. Sus actividades formativas se desarrollan dentro y fuera del aula, destacando el conocimiento del patrimonio cultural de proximidad in situ, lo que genera vínculos significativos entre el estudiantado y los bienes que este selecciona para su estudio. Entre los resultados se solicita: realizar una ficha diagnóstico con los datos esenciales del bien; analizar los valores patrimoniales; describir su situación ante el peligro detectado; aportar soluciones coherentes transitivas, para detener los daños, y definitivas, para eliminarlos; aportar imágenes históricas, actuales y de futura propuesta. Cada año se exponen los resultados en el Encuentro Interuniversitario de Estudiantes (2024: III edición) donde, además, se desarrollan competencias y habilidades comunicativas y se participa en debates de manera crítica y razonada. Para el trabajo se plantean tres opciones: investigar un bien individual, bien siguiendo el modelo tradicional de ficha diagnóstico, o bien realizando un vídeo de TikTok donde se incluyan los resultados de la investigación; planificar un itinerario cultural a partir de elementos con daños comunes; o crear un juego tras la realización de un glosario de términos, conceptos o situaciones específicos aprendidos durante el curso. En todos los casos se integran las humanidades digitales y las TIC, demostrando que la disciplina de Historia del Arte cumple un papel fundamental para la sociedad, a quien se le da a conocer este trabajo mediante eventos de divulgación, tales como la Noche Europea de los Investigadores. Finalmente, cabe destacar que la recuperación y puesta en valor del patrimonio cotidiano genera beneficios en el ámbito local y su territorio, permitiendo la aplicación de diversos ODS.