Las redes de apoyo de cuidados son fundamentales para que las parejas españolas con hijos puedan
conciliar sus horarios laborales y familiares. Este trabajo presenta los resultados de una investigación
en que se entrevistó a 15 parejas heterosexuales en las que ambos miembros trabajaban a tiempo
completo y que convivían con hijos de entre 3 y 15 años. Los objetivos que se perseguían eran tres:
conocer las características de las redes de apoyo de cuidado de menores, analizar el papel de los
miembros de dicha red que no son familiares, y comparar la presencia de hombres y mujeres en las
mismas. Los resultados muestran la diversidad de redes de cuidados, ofreciendo una imagen más
compleja y matizada de la que viene siendo habitual en otros estudios, donde se destaca
principalmente el papel de la familia. Si bien es cierto que, cuando está disponible, la familia suele ser
el principal proveedor de recursos, no es extraño encontrar en la red de apoyo a otros adultos que no
son familiares, especialmente amistades íntimas y personas que se han conocido en el entorno escolar
de los menores. Se pone también de manifiesto que los cuidados siguen siendo una tarea femenina,
ya que la mayoría de los miembros de las redes son mujeres y tienen vínculos más fuertes con la
madre que con el padre del menor.