Este artículo analiza el papel de la Unión Europea (UE) como actor de la gobernanza global en un mundo multipolar y fragmentado. Se centra en el caso de la diplomacia del agua de la Unión Europea, definida como el uso diplomático y estratégico de la cooperación en materia de agua para promover la paz, la seguridad y el desarrollo sostenible. El artículo sostiene que la diplomacia del agua de la Unión Europea es una herramienta para mejorar el poder blando de la UE y su influencia en la gobernanza medioambiental mundial. A través de un análisis de las principales iniciativas de la Unión Europea en este campo, el artículo ilustra cómo la UE busca construir alianzas con otros actores, promover el multilateralismo y los principios del derecho internacional, y apoyar la participación de la sociedad civil y las comunidades locales. Concluye que la diplomacia del agua de la Unión Europea es un ejemplo de liderazgo normativo y transformador de la UE que puede contribuir a la consolidación de un orden internacional más justo y sostenible.