Este artículo presenta la experiencia y los dilemas de enseñanza de un grupo de docentes en la formación inicial de profesorado del Grado en Educación Infantil, en su adaptación a la virtualidad ocasionada por la COVID-19. Un proyecto que, con 10 años de andadura, ofrece una oportunidad para repensar la formación inicial en el marco del confinamiento. Inicialmente se describe el complejo e incierto contexto social actual y los retos ineludibles para la formación inicial del profesorado: la reconstrucción del conocimiento práctico de nuestras estudiantes y el diseño de un habitus vivencial y crítico como sostén de los principios pedagógicos de la experiencia que describimos en la segunda parte. Un triángulo didáctico en relación permanente con las reflexiones de las estudiantes y los debates e inquietudes que como docentes hemos compartido en los espacios de coordinación y adaptación a la virtualidad. Las conclusiones de esta experiencia sitúan la coordinación y la tutorización como ejes relevantes, al mismo tiempo en el que se advierten las dificultades e imposibilidad de que una experiencia de formación inicial de docentes íntegramente virtual -sin una práctica en relación y presencia de los niños y niñas- facilite la reconstrucción del conocimiento práctico de maestras y maestros de Educación Infantil.