El traductor está obligado a usar, gestionar y procesar información que le ayude a encontrar soluciones a los posibles problemas que su tarea de traducción le plantee. Forma parte intrínseca de la competencia traductora, por tanto, la competencia documental del traductor, y, como tal, es tratada en los Estudios de Traducción que a día de hoy se ofertan en la Universidad española. En este trabajo interpretamos el tratamiento didáctico que se le concede a la competencia documental en la formación de traductores, tratada de forma exclusiva en asignaturas independientes o de forma transversal como parte de otras asignaturas de traducción. Posteriormente, presentamos una aplicación práctica centrada en el proceso de recuperación documental previo a la traducción, cuya implementación y evaluación permiten valorar la importancia del desarrollo de la competencia documental como parte de las competencias especí!cas profesionales que el futuro traductor debe desarrollar en cualquier par de lenguas.