El control transcripcional es el mecanismo más importante por el cual se regulan los niveles, momentos y órganos en los que se expresa un gen. Este control es llevado a cabo por la interacción de factores de transcripción con sus elementos cis específicos localizados en el promotor de los genes diana. De esta forma, un factor de transcripción dado puede desempeñar diversos papeles regulando la expresión de distintos genes en respuesta a los estímulos que la planta percibe o a los propios procesos fisiológicos de ésta.
En gimnospermas, concretamente en coníferas, se ha visto que el número de genes que codifican para factores de transcripción es menor que los descritos en angiospermas. Esto sugiere que las divergencias y especializaciones existentes en las familias de factores de transcripción de angiospermas no se han producido en las coníferas. Uno de estos casos es la familia Dof, en la cual se han identificado solo 10 miembros tanto en Pinus pinaster como P. taeda. Cada uno de ellos posee un patrón de expresión único y diferencial a la largo del desarrollo y tejidos de la planta.
En un estudio más detallado de uno de estos factores: Dof5, se ha visto que es capaz de regular diferencialmente la expresión de las isoformas de glutamina sintetasa de pino, enzima clave para la asimilación de nitrógeno. Induce la transcripción de GS1b e inhibe la de GS1a.
En un intento por determinar cuál podría ser su papel dentro de la planta, se han generado plantas transgénicas de Arabidopsis sobreexpresando este factor de transcripción. Mediante estudios de análisis de metabolitos, actividades enzimáticas y microarray hemos visto que está implicado en la regulación de genes tanto de procesos del metabolismo del carbono como del nitrógeno.