La presente reflexión tiene por
objetivo debatir respecto de la
pertinencia que tienen los sistemas
de medición de comprensión lectora
aplicados en Chile en contextos
cultura urbano popular. De este
modo, se establece la relevancia de
conjugar dos núcleos teóricos que,
hasta ahora, han estado disociados,
esto es, la disciplina Lingüística a
través del fenómeno de la
comprensión lectora y, el campo de
los estudios interculturales en cuanto
al abordaje de la realidad de sujetos
(estudiantes) en situación de
diversidad educativa, quienes asisten
a escuelas donde se aborda la
comprensión lectora, partiendo de
una serie de estrategias nacidas
desde la Didáctica de la Lengua
tradicional y sobre la base del
modelo pedagógico de lectura
(Alliende y Condemarín, 2002) con
el fin de mejorar, única y
exclusivamente, los rendimientos en
las
pruebas
estandarizadas
nacionales e internacionales, tales
como PISA y SIMCE, obviando así
la subjetividad de los estudiantes.